Después
de unas discusiones a fondo, sobre nuestro Pliego de Peticiones, y al no poder
lograr sus propósitos tendenciosamente dañinos, parece que al Doctor Henry Mena
Abadía, no le ha quedado camino distinto que descubrir la persecución sindical
que tenía en ciernes contra los Directivos de UNIGEEP. Su incapacidad y
contradicciones, distanciadísimas de todos los pergaminos con que se presenta y
lo exhiben, quedaron develadas al demostrar que cuando no puede con los argumentos
del otro, inicia acciones que reflejan un desquite, quizá por saberse en
condiciones inferiores.
Es
normal que cuando ciertos personajes prueban su dificultad argumentativa,
frente a las disertaciones propias de quien conoce bien de lo que habla, los
complejos de inferioridad fluyan, sumados a algunos menoscabos que se vuelven
más evidentes al tener que recurrir a
las mentiras, dado la falsedad con que actúan. En el Doctor Mena Abadía se
hacen muy notorios estos eventos, habida cuenta que la dislalia y los nervios
se apoderen de él, al percibir que su contraparte no le cree sus acostumbradas
entelequias.
Como
Miembros Directivos de UNIGEEP hemos recibido unas funciones y tareas, las
cuales asumimos con la responsabilidad y confianza que nuestros afiliados nos
han depositado. De ahí que claudicar y entregar principios frente a quien está lleno
de cartones y fama, pero alejado de todo conocimiento, para nosotros sea un
imposible. Así el Doctor Mena Abadía, corroborando su inopia en todos los
sentidos, le haya hecho firmar un contrato a nuestra empresa de más de 1.300
millones de pesos, con quienes vinieron a darle la mano, pero que tampoco
probaron nada, nuestra intención no es la de feriar nuestra compañía ni la de regalar
los derechos de nuestros trabajadores.
En
una retaliación, entendible desde su posición de frustración, el Doctor Mena
Abadía, ha decidido negarnos los permisos sindicales, con que hemos contado
desde hace más de un año. Llegando al punto extremo de deslegitimar y
desautorizar a los demás Directivos de UNE EPM Telecomunicaciones que llegaron
a unos convenios, conversaciones y acuerdos con nuestra organización sindical.
Esto sin perjuicio de mencionar que ahora usa a sus compañeros como obedientes
lazarillos, pues tienen que hacer lo que él diga, o de lo contrario sus puestos
de trabajo corren serios peligros y se arriesgan a ser empaquetados en los
grupos de despedidos.
Hoy,
en una forma alevosa, atrabiliaria y desafiante, una hora y cincuenta y cinco
minutos después de conocer un Derecho de Petición que nuestro Presidente le
enviara al Presidente de UNE EPM Telecomunicaciones, el Doctor Mena Abadía, en
su desespero, informa de la apertura de un proceso en contra de nuestro
Tesorero, Carlos Mario Zapata Hurtado, por unas supuestas ausencias a su puesto
de trabajo. Lo que acaba de configurar una persecución sindical hacia UNIGEEP,
toda vez que existen elementos que prueban lo contrario. Lo más siniestro es
que el personaje de marras, demuestra claramente su intención, a como dé lugar, de ver la sangre de algún directivo nuestro
rodando por cualquier parte. Esto último se puede dar fácilmente, pues de todos
es conocido que estamos muy vulnerables, de cara a las amenazas y presiones que
posan sobre nosotros.
Observando
que estas conductas, actuaciones y decisiones, no sólo interfieren nuestras
actividades y funciones sindicales, sino que colocan nuestra seguridad e
integridad en gravísimos peligros y riesgos, porque consideramos
tendenciosamente sospechosas estas arbitrariedades, hemos definido acudir ante
las instancias necesarias y requeridas, toda vez que no sepamos lo que una
motivación acomplejada, por razones de credo, ideología, raza o costumbres,
pueda desatar. Lo cierto queridísimos compañeros es que con la Persecución Sindical Contra UNIGEEP no
podamos anticiparnos a los hechos venideros, pero de alguna anomalía funesta
que nos suceda, ya tienen a quien responsabilizar.
"Dos cosas
son infinitas: el universo y la estupidez humana; y yo no estoy seguro sobre el
universo"
— Albert
Einstein---
JUNTA DIRECTIVA
UNIGEEP
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