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lunes, 14 de mayo de 2012

Que aparezcan los responsables

Que aparezcan los responsables


En una seguidilla de hechos lamentables para UNE EPM Telecomunicaciones S.A., continúan apareciendo los rezagos de una desadministración que ha colocado en la picota pública la buena imagen de una empresa más que promisoria. Esto sumado a decisiones que consideramos poco pertinentes en el camino de hallar las salidas y soluciones a las problemáticas heredadas.

Cuando no llevamos ni siquiera año y medio de estar trabajando en las locaciones de Santillana, ya se planteó, en los distintos grupos primarios, que se debe desalojar el edificio dado que el contrato de alquiler se termina el 31 de marzo de 2013. Como si fueran pocos los más de 24.000 millones de pesos que se desembolsaron para las adecuaciones, traslados de personal y canon de arrendamientos, entre otros. Tremenda estafa que se agrega a otra diáspora de los trabajadores por la ciudad y a otros negociados conocidos y denunciados por UNIGEEP.

Frente al hecho de continuar con el pago de cuantiosas sumas de dinero en arriendos, se hace más que necesario el proyecto realizable de la construcción o compra de una sede propia, con la cual se evitaran en un inmediato plazo, desplazamientos injustificados de toda la masa laboral, como fuerza errante, por el área metropolitana. En charlas con varias personalidades y estamentos de la ciudad, UNIGEEP, ha sido insistente en plantear esta solución. El municipio y la casa matriz tienen las facultades especiales para ofrecer salidas y proponer alternativas, mismas que se pueden aunar a las que tenemos como organización de cara a los trabajadores y a la empresa.

No bastando con las erogaciones cuantiosas, en todos los sentidos, se suman contrataciones de personal directivo sin el lleno de los más mínimos requisitos, solo bastando para ello tráfico de influencias consumado y tangible a través de correos. Pero los involucrados personajes siguen ahí. Los implicados como contratados y contratantes continúan ostentando sus cargos sin son ni ton. Pareciera que el erario poco duele todavía. La política pública sigue indigerible.

Es muy importante tener en cuenta que de la situación generalizada, no se salvan ni las filiales, porque por conocimiento pleno y veráz sabemos de la cantidad de vinculaciones amañadas y sin criterio que se están dando en EMTELCO, entidad de nuestro grupo. Allí se vienen manejando las cosas como de bolsillo de sus directivos. Se ha contratado a personal que terminó su vida laboral en UNE EPM Telecomunicaciones S.A., pero que allá consiguen jugosas sumas económicas bajo el pretexto de consultores.

La situación de EMTELCO se empeora con la persecución de que vienen siendo objeto los trabajadores por cuenta de la administración, en una cacería de brujas para encontrar los culpables de la fuga de información. Lo más lamentable y detestable fue el despido masivo de que fueron víctimas varios empleados que trataron de crear un sindicato al interior de esta empresa. Se violentaron todas las normas internas colombianas y los convenios internacionales, para lo que utilizaron la infiltración de una agente de la administración, quien dio los nombres de los funcionarios que pretendían tal hazaña,  lo que produjo el inmediato despido de éstos. Sea este el momento para expresar nuestra voz solidaria y nuestro mas enérgico repudio y rechazo al cercenamiento del derecho de asociación y de libertad sindical.

En UNE EPM Telecomunicaciones S.A., se están llevando a cabo unas evaluaciones y calificaciones que tienen como objeto medir al trabajador, con un rigor subrepticio, pues el afectado no estará al tanto ni de la mecánica ni de los resultados obtenidos. Esta figura, contrasta con las buenas prácticas públicas, debido a que se puede volver  una política inquisidora en contra de quienes han fortalecido y sostenido la entidad. Esperamos que para bien de la empresa y sus empleados, los efectos sean positivos y no los ya acostumbrados por los que buscan la reducción de costos a través del capital intelectual que subyace en nuestros funcionarios.

Los temas enunciados, más otros, se le plantearon a la Dirección de Control Interno de la empresa, en reunión que sostuviéramos, para que se tomen los correctivos y ajustes obligatorios del caso. Partiendo del entendimiento y acatamiento de la orientación impartida desde la Presidencia de la compañía, de tocar y ventilar problemáticas existentes al interior de nuestro ente. Eso sí buscando y deseando, por los todos medios adecuados, que aparezcan los responsables y que paguen por las irregularidades que han cometido y por el abismo a que han llevado a UNE EPM Telecomunicaciones S.A.
Fraternalmente,


Junta Directiva
UNIGEEP

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