Cuando se fundó UNIGEEP, hace ya tres
años y medio, fue clara nuestra propuesta de apoyar iniciativas que condujeran
al sostenimiento indefinido de nuestras empresas, vinieran de donde vinieran.
Esta disposición se dio sin el más mínimo ánimo de asumir una coadministración o
de entrometernos en temas del resorte de quienes podrían haber generado unos
resultados positivos, dados sus onerosos salarios, excelentes comisiones y
beneficios. Nos ofrecimos, infinidad de veces, para ayudar a generar las
políticas y programas que reposicionaran a UNE EPM Telecomunicaciones en los
puestos de primer orden a nivel local y nacional. Sin embargo fuimos
desatendidos en la forma despectiva conocida por todos.
Observando cómo se sigue llevando
nuestra empresa por los despeñaderos innecesarios de los negociados que
benefician a los agentes apátridas existentes en nuestro territorio, asumimos
la tarea titánica de denunciar todas las atrocidades que todos conocemos y que
colocan en gravísimo riesgo nuestros puestos de trabajo, acabando con nuestros
patrimonios públicos. Las estrategias continuistas de las administraciones que
ha tenido UNE EPM Telecomunicaciones, todas nefastas hasta hoy, se han convertido en las posibles victimarias
de la inversión social de la comunidad y del sustento nuestro para bien de
nuestras familias.
No obstante todos los riegos,
presiones y amenazas, hemos estado cumpliendo con lo que nos permite el marco
constitucional y legal colombiano. Las fiscalías, los juzgados, las personerías,
las procuradurías, las contralorías, las auditorias, todas las superintendencias
y la Presidencia de la República, entre muchos otros, han recibido de parte
nuestra toda una hondonada de denuncias y quejas que buscan frenar la
pretensión de entrega de nuestros recursos estatales a manos extranjeras con la
complicidad de los seudofuncionarios públicos ya descritos. Más que evidenciado
está el hecho que compromete a muchas personalidades con actos contra la
constitucionalidad y la legalidad, cual forajidos socialmente rechazados.
Por más que esta administración trate
de deslegitimar las actuaciones de ciertos órganos de control, que tienen
investigaciones a fondo de los actos de ciertos funcionarios contra la fe y la
moral públicas, haciéndole creer a los ingenuos que aquí no va a pasar nada, la
Personería de Medellín ha comenzado a mostrar resultados que conducen a impedir
que ciertos hechos queden impunes. Es así como desde la semana pasada, y
producto de las denuncias de UNIGEEP, se han dado algunos fallos que condenan a
funcionarios y ex directivos de UNE EPM Telecomunicaciones, como Adriana
Vergara Álvarez, Claudia María Rúa Puerta, María Luisa Escolar Sudheim y
Alfonso León Ossa Gómez. Dichas resoluciones sancionatorias han sido apeladas y
será el Personero quien absuelva o ratifique, pero existen los argumentos
necesarios que corroboran nuestras razones.
Pero la cosa no queda allí. Con todos
los actos que UNIGEEP ha estado llevando a cabo, los comprometidos superiores
no pueden estar durmiendo tranquilos, porque por ellos vamos y no descansaremos
hasta obligarlos a responder por sus
acciones viles y perversas. Los procesos iniciados de nuestra parte alcanzarán,
tarde que temprano, a todos los implicados, de una u otra manera, en los
sucesos tendenciosos contra nuestra UNE EPM Telecomunicaciones. Los Hechos y Sanciones están comenzando a
dar buena cuenta de los que piensan que la justicia nunca llegará a
recriminarlos por sus conductas deshonestas. Nuestra organización de la mano de
quienes nos han brindado su confianza y apoyo, ha estado cumpliendo.
Junta
Directiva
UNIGEEP
No hay comentarios:
Publicar un comentario