La administración de UNE EPM
Telecomunicaciones, como siempre, viene haciendo uso de unas artimañas muy
dañinas para todos los trabajadores. Recurriendo a las viejas estrategias de
mejorar las condiciones de las personas, las persuaden para que accedan a los
propósitos que sólo les sirven a los violadores de derechos para sus fines y
políticas execrables. De ahí que insistamos en hacerle un llamado muy fraternal
a quienes tengan cinco dedos, para que no caigan en las trampas evidentes que
todos los días se ciernen sobre los ilusos.
En un estado proxeneta que está
violentando los convenios 81 de Inspección de Trabajo, 87 y 98, de
Asociación Sindical y Negociación Colectiva, respectivamente, para que
multinacionales como Millicom, los capitales financieros internacionales y
las potencias económicas, tengan en nuestro país un paraíso para sus
inversiones por las gabelas otorgadas por este y los anteriores gobiernos, el
salario integral es otro mecanismo para terminar de asaltar los derechos de los
trabajadores. El ejemplo que tenemos de muchos compañeros, a los que los han
ensalzado para después pegarles la puñalada trapera, con el despido injusto, no
nos deja mentir.
La precarización del
empleo y el robo sistemático y progresivo de las conquistas laborales,
requieren de una engañosa imagen, para nuestro país, de democracia y libertades
sindicales sin controles de estamentos internacionales como la O.I.T. Esto
conduce a los enemigos de los trabajadores a mantener el estado de cosas en
cuanto a desconocimiento de los derechos laborales. Por eso la tercerización e
informalidad, violencia antisindical y desempleo reinantes son figuras que
ratifican nuestra postura vehemente en contra de estas políticas miserables. Lo
propuesto a muchos jefes,
a los que les pasaron su nómina para que la manejaran los combos económicos del
grupo usurpador que nos administra, es también otra triste muestra que prueba
que no estamos equivocados.
Eso sí, mientras el presidente de la
compañía continúa con sus espacios mediáticos en los que trata de vendernos una
transparencia llena de montañas de bazofia, las asesorías multimillonarias
siguen su curso normal en contra de los trabajadores. Porque el certero
aforismo de darle a sus amigos lo que les pidan y a sus enemigos aplicarles la
ley, está hoy más vigente y manifiesto que nunca. Sólo se debe cumplir con un
requisito: que el dinero salga de UNE EPM Telecomunicaciones y pase a los
bolsillos de los que se están aprovechando del desangre se nuestra compañía,
mediante una nómina inminentemente paralela: la inútil e inepta interna y de
planta y la de los vividores y saqueadores que proceden de afuera.
Es evidente que en nuestra compañía sí
existen unos cargos redundantes, y que por meras razones sobran: los de
aquellos que por su incapacidad y pusilanimidad le crean negocios a los pseudo-asesores
foráneos para que vengan a ganarse millonadas por desarrollar actividades en
las que no logran demostrar su probidad. Lo cierto es que al final todos
terminan apoderándose de sueldos y honorarios indebidos, toda vez que sus
resultados los justifican acometiendo las políticas que perjudican a los
trabajadores y que entierran la sostenibilidad y viabilidad de nuestra empresa.
Los Engaños persistentes y recurrentes de esta administración, son las
fundamentaciones más contundentes para que los trabajadores no sigan cayendo en
trampas como las convocatorias, en donde no se especifican todas las
condiciones, pero a la hora de firmar, se conoce que se trata de la renuncia a derechos y beneficios que se tienen desde
hace muchos años. Lo anterior, sin perjuicio de insistir en la mención de todo
lo que hemos venido denunciando y demandando.
Junta
Directiva
UNIGEEP
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