Después de su llegada, en marzo del
año 2015, bajo unas condiciones totalmente desconocidas, porque no sabemos de
dónde sacaron un personaje tan peculiar por sus desaciertos y brutalidades, fue
despedido el Señor Henry Mena Abadía, antes de cumplir los catorce meses, con
la pantomima de una renuncia. El viejo cuentito de unos acuerdos amables con
Millicom, no deja sino la certeza de que cuando ya no se necesita a un sicario
laboral, la solución es sacarlo como al mayor de los estorbos, por la puerta trasera.
Como era de esperarse de un personaje
anómico, alejado de toda civilización consciente de nuestra constitución y
leyes, supuestamente siendo abogado, inicia una confrontación, de tamaño
mayúsculo, con nuestra combativa UNIGEEP y toda su Dirigencia. Tal vez pensando
que ante un esperpento irracional, nuestros valerosos y luchadores
representantes saldrían corriendo de huida. Pero se encontró con un monolito
que le logró probar que por mucho que el poder esconda a los brutos, la razón
prevalecerá por encima de cualquier circunstancia o adversidad.
El Señor Henry Mena Abadía se hizo popular
de una manera vergonzosa por muchas cosas negativas, pues fue el que dio origen
a las famosas “Tigombianadas”, en las
que unas veces lo acompañó su amiga de andanzas Marie Claude Joachim Peñuela, quien
salió de la empresa en iguales condiciones que él. Recordemos algunas: Le puso
dos domingos a una sola semana; dijo que trabajaba en la empresa Tigo-UNE, y
nunca nos pudo entregar las escrituras que confirmaran lo expresado; dijo en el
Ministerio de Trabajo, que no le había encontrado sinónimo a la palabra cupo;
de la Señora Marie Claude, es de recordar que nos firmó una tutela que era para
otro tutelante. Pero lo más delicado y grave contra la Dirigencia de UNIGEEP,
fue que el Señor Mena Abadía escribió que les tenía un “Tramite especial”,
junto a nuestros Hermanos de la Subdirectiva Sintraemsdes Cali, hechos que por
fortuna, ya están en las debidas instancias de nuestro país.
Lo más triste es que el Señor Henry
Mena Abadía, investido de unas ínfulas, no raras en personas como esta, y
transferidas por sus superiores para hacerle creer que algo sabía, atentó
contra toda la masa laboral de UNE EPM Telecomunicaciones S.A., cuando menos
con procesos disciplinarios inventados de cualquier manera, y con despidos
infames, de los que ya hace parte él, no en forma canalla sino merecida, porque
así paga el diablo a quien bien le sirve. Los trabajadores y familias enteras
que este espécimen afectó, fueron en un número muy considerable, y todos piden
justicia ante las arbitrariedades cometidas; y ya se comenzaron a ver los
resultados, faltando los que tienen que ver con la justicia jurídica a que está
abocado, y la divina y celestial, por supuesto.
Desde un principio UNIGEEP, ha hecho
advertencias severas y muy serias sobre la confrontación propuesta por esta
administración y todos sus séquitos; y van en el sentido que para nosotros
nuestras empresas, como patrimonios públicos, y sus trabajadores, con sus
derechos laborales, son nuestra razón de ser. Y no vamos a renunciar a todo
tipo de lucha, enmarcada en la constitución, leyes colombianas y convenios
internacionales, para defenderles, porque son las herramientas que el estado
social de derecho nos da y nos permite. Por eso el Despido de Henry Mena Abadía de UNE EPM Telecomunicaciones S.A.: Parte
de Victoria de UNIGEEP es para ofrecérselo a todos nuestros afiliados y
demás empleados. Con orgullo podemos decir, que son muchos los que nos han tratado
de hacer daño, pero también son demasiados los que hoy están contando el cuento
por fuera. Y faltan otros más, porque o son ellos o nuestra empresa o es
Millicom o es Medellín.
“Para
bruto no se estudia, se nace”
Anónimo
Junta Directiva
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